CONCILIO INTERNACIONAL DE IGLESIAS EVANGÉLICAS
HACIENDO DISCIPULOS INC.
La Pastora María Magdalena Jiménez. Con el único y marcado objetivo de multiplicar el reino de Dios y la salvación de las almas, y debido a la larga trayectoria de evangelización que la caracteriza, se reunió en asamblea junto de quienes brotó el siguiente reglamento y constitución de, sobre el cual se sobreedificará el Concilio Internacional de Iglesias Evangélicas HACIENDO DISCIPULOS INC.
Nuestra Visión:
Llegar hasta lo último de la tierra con el evangelio de nuestro Señor Jesucristo y la Bandera de los militantes en nuestro concilio HACIENDO DISCIPULOS para ganar almas para el Reino de los Cielos, plantar iglesias y organizar movimientos o concilios nacionales e internacionales.
Nuestra Agenda:
"Pero recibiréis poder cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria y hasta lo último de la tierra." - Hechos 1:8.
Nuestra Misión:
"Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo;" - Mateo 28:19.
Nuestro Lema:
"Amados, por el gran deseo que tenía de escribiros acerca de nuestra común salvación, me ha sido necesario escribiros para exhortaros a que contendáis ardientemente por la fe que ha sido una vez dada a los santos, porque algunos hombres han entrado encubiertamente, los que desde antes habían sido destinados para esta condenación, hombres impíos, que convierten en libertinaje la gracia de nuestro Dios y niegan a Dios, el único soberano, y a nuestro Señor Jesucristo." - Judas 3,4
Nuestro Tema:
Manteniendo nuestra identidad.
CERTIFICACIÓN
Se certifica que estos documentos están escritos según fueron aprobados en las Asambleas correspondientes.
1. El Credo fue aprobado en la Asamblea constitutiva celebrada en Brooklyn, Nueva York EE.UU. y revisado en la Asamblea correctora celebrada en Puerto Plata, República Dominicana.
2. La Constitución fue aprobada en la Asamblea Constituyente celebrada y revisada en la Asamblea Bienal celebrada en EE.UU. con una segunda revisión y posterior aprobación en la Asamblea Bienal celebrada en República Dominicana.
3. El Reglamento fue aprobado en la Asamblea Bienal celebrada en República Dominicana, durante los días 12 al 15 de agosto del 2,010 y en la Asamblea Extraordinaria celebrada también en República Dominicana, durante los días 20 al 24 de agosto del 2,010 y revisado en la Asamblea Bienal celebrada en República Dominicana, durante los días 20 al 24 de agosto del 2012. Revisado en Diciembre del 2013 por disposición del comité gestor. Dra.-María Magdalena Jiménez. Rev.- Felipe Mendoza Presidente Secretario
PREÁMBULO
EL CONCILIO INTERNACIONAL DE IGLESIAS EVANGÉLICAS HACIENDO DISCIPULOS INC., es una organización sin fines de lucro que integra Movimientos Internacionales de Iglesias afiliadas voluntariamente en pro de la expansión del evangelio a nivel mundial y reconoce la autonomía operacional de sus miembros. Nosotros, sus miembros, movidos por la convicción de que la voluntad de Jesucristo es que los creyentes en Él estén unidos eficazmente en amor, esforzándose por la expansión de su Reino, nos hemos organizado con el siguiente Credo, Constitución y Reglamento.
——- SOBRE NUESTRAS DOCTRINAS FUNDAMENTALES——-
1. Las Sagradas Escrituras:
Creemos en la inspiración sobrenatural de las Sagradas Escrituras, como aparece en los sesenta y seis libros de la Biblia. Es la Palabra de Dios, la única regla de fe y conducta. (2 Ti. 3:16; Jn. 5:39).
2. El Dios Único:
Creemos en la existencia de Dios, un Ser Único, Supremo, Santo, Eterno, Creador del universo. Él trasciende toda la creación y a su vez es omnipresente en cada parte de ella. (Gn. 1:1; Sal. 19:1; Mt. 6:8-9).
3. La Divina Trinidad:
Creemos en la Divina Trinidad, revelándose como Padre, Hijo y Espíritu Santo. Son tres personas de la misma esencia, poder y eternidad. Se relacionan entre si y a la vez se distinguen entre ellas. (Mt. 3:16-17; 28:19).
4. Jesucristo el Hijo de Dios:
Creemos en Jesucristo, la segunda persona de la Divina Trinidad, su nacimiento virginal, vida sin pecado, sus milagros, crucifixión, el sacrificio vicario, la resurrección y la ascensión.
Tomó naturaleza humana, murió y resucitó para salvarnos. (Mt. 1:18; Jn. 1:1- 14; 3:16; Lc. 24:13:51).
5. El Espíritu Santo:
Creemos en el Espíritu Santo, la tercera persona de la Divina Trinidad. Mora en el creyente y le guía a toda verdad y a toda justicia. (Hch. 1:8; 2:4; 13:2).
6. La Creación:
Creemos que la existencia de todas las cosas visibles e invisibles obedece a la obra creadora de Dios. (Gn. 1:1; 1:31; 2:12; Sal. 19:1; Sal. 24:1: Hb. 11:3).
7. El Hombre:
Creemos que el hombre fue creado a imagen y semejanza de Dios y en perfecta comunión con su creador. Creemos que se le concedieron atributos de santidad, sabiduría, libre albedrío y con afectos naturales. Creemos también que el hombre es corona de la creación y el objeto del cuidado especial de Dios. (Gn. 1:26-28; Sal. 8:5-8). 7.1 La caída y la redención del hombre: Creemos que el hombre cayó por transgresión, por decisión propia y voluntaria. Creemos que el único medio de redención es aceptando el plan redentor provisto por Dios en la persona de su Hijo Jesucristo. (Gn. 3:15; Jn 3:14; Ro. 10:9-10). 7.2 Salvación: Creemos que el hombre es salvo mediante la aceptación en público de Jesucristo como su Salvador. Creemos que esta salvación es por gracia mediante el sacrificio de Cristo en la cruz del Calvario (Ef. 2:8); que es justificado por la fe en Cristo; (Rm. 5:1); es heredero de una vida eterna (Jn. 3:16; Tit. 3:7). Creemos que la salvación obtenida al creer en Cristo es inmediata (Lc. 19:9; Jn. 5:24) y que es indispensable permanecer en El para conservarla. (Mat. 24:13 He. 2:1-2).
8. Bautismo en agua:
Creemos en la ordenanza del bautismo en agua por inmersión en el nombre. (Mt. 28:19).
9. La Cena del Señor:
Creemos en la ordenanza de practicar la Cena del Señor. Consiste del pan y del jugo de la vid, los cuales simbolizan el cuerpo y la sangre de nuestro Señor Jesucristo. Constituye un recuerdo de su sufrimiento, muerte y una profecía de su segunda venida. (Mt. 26:26- 29; Mr.14:22-25; Lc. 22:13-20; 1Co. 11:23-26). Creemos que los participantes deben ser creyentes bautizados en agua y que estén en plena comunión con la iglesia.
10. El bautismo con el Espíritu Santo:
Creemos que todo creyente tiene el privilegio de recibir la promesa del Padre concerniente al bautismo con el Espíritu Santo. Es una experiencia sobrenatural posterior al nuevo nacimiento. Todo creyente debe anhelarla. Capacita para vivir una vida de santidad y servicio efectivo en la obra del Señor. (Lc. 24:49; Hch. 1:8; 2:4; 8:14-17).
11. La Santificación:
Creemos que es necesario vivir una vida de santidad sin la cual nadie verá al Señor (He. 12:14; 1Ts. 4:3). La santificación se obtiene con la muerte de Cristo. (He. 2:11; 10:14; 13:12; 1Co. 1:30) Luego de la conversión el Espíritu Santo va perfeccionando la obra de Dios en el creyente, capacitándolo para una vida de Santidad. (Jn. 17:16-19; 1Ts. 5:22-24) La santificación es una clara separación del mundo a una forma de vida digna de un Dios Santo.
12. La Sanidad Divina:
Creemos en la promesa bíblica relativa a la Sanidad Divina y que la iglesia recibe autoridad del Señor Jesucristo para sanar enfermos en su nombre. (Sal. 103:3; Is. 53:4- 5; Mr. 16:18; Stg. 5:14).
13. La Segunda Venida de Cristo:
Creemos en la segunda venida de Cristo. (Hch. 1:11) con los siguientes eventos: Creemos en el rapto o traslación de la iglesia y que este evento será antes de la gran tribulación. (1Ts. 4:15-17). Creemos en la segunda manifestación de Cristo en forma corporal y visible y que establecerá su reino milenial sobre la tierra. (Mt. 24:30; Hch. 1:11; Ap. 1:7; 5:10, 11:15; 20:1-7; Dn. 7:14; 1Co. 15:25) Creemos en el juicio final con retribución de Vida Eterna para los justos y castigo eterno para los injustos. (2 P. 3:7).
14. El matrimonio:
Creemos en el acto del matrimonio según lo estableció Dios desde el principio. Creemos que la única relación de pareja que debe existir es a través del matrimonio y que el matrimonio debe realizarse solo entre un hombre y una mujer de sexo contrarios naturales. Los seres humanos nacen siendo varón y hembra porque así los creó Dios desde el principio.(Gn. 1:27; 2:21-25) Rechazamos totalmente toda relación homosexual y la declaramos contra naturaleza (Ro. 1:26 y 27). La homosexualidad no es un estilo de vida sino una condición pecaminosa para los que la practican y depravante para la sociedad.